Laura Cozzi, directora de tecnología de la Agencia Internacional de Energía (IEA), dijo a Reuters que una guerra arancelaria global en escalada podría plantear desafíos para la industria emergente de inteligencia artificial y ralentizar su crecimiento.
En un informe publicado el jueves, la IEA señaló que para 2030, Estados Unidos, China y la Unión Europea representarán el 80% del crecimiento previsto en la demanda de centros de datos, impulsado principalmente por el uso de inteligencia artificial.
Cozzi explicó que el escenario desfavorable del informe "abarca muchos factores que observamos: una desaceleración del crecimiento económico, más países imponiendo más aranceles. Por lo tanto, en el entorno arancelario actual, el crecimiento de la inteligencia artificial será efectivamente más lento que nuestra expectativa base".
El informe indica que aproximadamente el 50% de la inteligencia artificial que se desarrolla en EE. UU. está ubicada en grandes clústeres existentes, lo que podría aumentar el riesgo de cuellos de botella localizados.