Recientemente, el sindicato de trabajadores del petróleo y el gas de la provincia argentina de Chubut, rica en petróleo, anunció que amenazaba con ir a la huelga el martes debido al despido de cientos de trabajadores por parte de Halliburton y a su decisión de cerrar su oficina local. El anuncio ha suscitado gran interés.
Carlos Gómez, secretario adjunto del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Chubut, aclaró en el canal de radio del sindicato que «Halliburton ha retirado su compromiso de mantener los niveles de personal y despidió abruptamente a 290 trabajadores el lunes por la noche sin previo aviso al sindicato.» La medida provocó la protesta de los trabajadores.
Ante esta situación, el sindicato de trabajadores del petróleo y el gas de Chubut actuó con rapidez, presentando una queja ante el departamento regional de trabajo y solicitando una mediación obligatoria. Gómez enfatizó que «si al final de la mediación obligatoria Halliburton no ha resuelto la cuestión de los casi 300 trabajadores despedidos, los dos principales sindicatos realizarán una huelga general en todos los yacimientos de petróleo y gas». El sindicato representa a unos 8.000 trabajadores y su huelga tendrá importantes repercusiones en la industria petrolera local.
El sindicato sigue de cerca la evolución de los acontecimientos y se prepara para emprender nuevas acciones en defensa de los derechos de los trabajadores. Mientras tanto, los trabajadores de la vecina provincia de Santa Cruz también están en huelga desde la semana pasada para impedir que YPF abandone la región. La región produce aproximadamente el 10% del petróleo argentino, y la huelga ha tenido igualmente un impacto considerable en la economía local.