Los países de la Unión Europea están negociando flexibilizar los objetivos vinculantes de almacenamiento de gas natural para mitigar las preocupaciones sobre el aumento de precios. Según un documento de negociación obtenido por Reuters, países como Alemania, Francia y Países Bajos han advertido que los plazos actuales de llenado de gas impuestos por la UE podrían estar elevando los precios en el mercado.
El documento revela que los Estados miembros están discutiendo modificaciones a estos objetivos. La Comisión Europea propuso la semana pasada mantener estos objetivos vinculantes hasta 2027, pero los países de la UE y el Parlamento Europeo tienen la autoridad para modificar la propuesta y aprobar las reglas finales. Se está considerando ajustar el requisito de llenar las instalaciones de almacenamiento de gas al 90% de su capacidad antes del 1 de noviembre, posiblemente permitiendo que se complete en cualquier momento entre el 1 de octubre y el 1 de diciembre.
La propuesta también sugiere que la UE cumpla voluntariamente una serie de objetivos intermedios en los meses previos a noviembre para llenar gradualmente las cuevas de almacenamiento de gas. Este aumento de flexibilidad busca reducir las preocupaciones del mercado sobre la compra masiva de combustible por parte de compradores europeos antes de una fecha fija, evitando así oportunidades para la manipulación de precios.
Los diplomáticos de los países de la UE planean discutir esta propuesta la próxima semana y podrían realizar más modificaciones a las reglas. La propuesta de negociación fue preparada por Polonia, que actualmente ostenta la presidencia rotatoria de la UE y está liderando las negociaciones entre los Estados miembros. Los representantes polacos aún no han respondido a las solicitudes de comentarios.
La Comisión Europea señaló que aplicará de manera más flexible el objetivo de almacenamiento de gas para noviembre de este año, pero las preocupaciones de los gobiernos no se han disipado. Temen que, si los precios del gas se disparan, los gobiernos enfrenten costos significativos para llenar los espacios de almacenamiento. Este temor surge tras la imposición de objetivos de almacenamiento de gas por parte de la UE en 2022, después de que Rusia redujera drásticamente sus envíos de gas, con el objetivo de garantizar reservas suficientes para la temporada alta de calefacción invernal.